Todo comienza con una huella digital – en los dos sentidos de la palabra – que inicia el proceso de creación. Esta idea se materializa en un símbolo compuesto por 5 círculos de colores que representan las 5 huellas dactilares de una mano.
El sistema presenta también una ventana blanca que interactúa con los distintos fondos, desvelando imágenes creativas, metafóricas o tecnológicas que pretenden hacer que la misión de marca de BQ cobre vida. Imágenes que pretenden inspirar, animar y hacer comprensible y cercana la tecnología.