El nuevo logo presenta únicamente la palabra Salt en una tipografía Superior, de Jeremy Mickel. Esta tipografía "fue elegida para diferenciar claramente a Salt del resto de marcas del sector de aspecto más corporativista".
También se ha creado un tono de voz directo, sencillo y llamativo.
La compañía ha descartado el naranja como color corporativo y lo ha cambiado por negro, blanco y una paleta de verdes. También se incluye una trama basada en puntos, que ayuda a completar las composiciones y adquiere un importante componente dinámico en las animaciones